La reciente muerte de un joven durante un operativo de alcoholímetro en Santa Lucía del Camino desató una serie de reacciones y un intenso debate en Oaxaca. Autoridades estatales se pronunciaron enérgicamente sobre el caso para exigir a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGEO) una investigación exhaustiva para castigar a los responsables. El llamado del mandatario oaxaqueño fue determinante al marcar la línea de acción a seguir en este trágico incidente que ha conmocionado a la población.
La versión de los municipales
Lo que comenzó como una rutina de seguridad vial culminó con un saldo de un policía lesionado en estado crítico, y la muerte de uno de los jóvenes implicados.
El operativo de alcoholímetro se llevó a cabo la noche del viernes 30 de agosto en la Avenida Lázaro Cárdenas, esquina con la calle Huamúchil, como parte de las medidas de seguridad vial implementadas por la Policía Vial Municipal de Santa Lucía del Camino.
Según la versión oficial de la Policía Municipal, dos hombres que transitaban a bordo de un automóvil Audi, intentaron evadir el punto de revisión.
Al marcarles el alto, los jóvenes, quienes presuntamente se encontraban en estado de ebriedad, intentaron evadir el control, atropellando a dos agentes policiales, quienes sufrieron graves lesiones. Uno de los policías quedó con la pierna fracturada en dos, y el otro, el comandante de la unidad, sufrió traumatismo craneoencefálico severo, por lo que fue trasladado de urgencia a un hospital especializado en la ciudad de Oaxaca.
De acuerdo a los policías viales municipales, tras arrollar a los oficiales, los jóvenes descendieron del vehículo y comenzaron a agredir físicamente a los uniformados.
En respuesta, los uniformados repelieron la agresión y persiguieron a los jóvenes; durante la confrontación que siguió, uno de los agentes disparó para detenerlos.
A pesar de los esfuerzos médicos, Diego P., quien conducía el vehículo, falleció posteriormente en el hospital debido a la gravedad de sus heridas. El otro joven fue detenido y puesto a disposición de la FGEO.
El comunicado de la Fiscalía
En su primer comunicado al respecto, la FGEO informó que el incidente comenzó cuando los jóvenes, identificados como Josué R.M. y Diego P., trataron de evadir el operativo y atropellaron a un policía vial, y que sabían que había un segundo elemento que pudo resultar con lesiones por esta agresión.
Tras este primer incidente, los jóvenes abandonaron el automóvil y fueron perseguidos por los agentes, lo que culminó en la detención de Josué R.M. y en la muerte de Diego P. debido a una lesión por arma de fuego.
La Fiscalía confirmó que uno de los policías resultó gravemente herido al ser atropellado y que está recibiendo tratamiento médico especializado. Señaló que está a la espera de los resultados de la autopsia y otros estudios forenses para determinar con precisión las circunstancias de la muerte del joven.
#Entérate | Ya hay avances entorno al homicidio del estudiante de la U. Anáhuac. Fiscalía de Oaxaca detiene a elemento del policía municipal involucrado. #Oaxaca pic.twitter.com/T0jdOqfZq3
— El Imparcial de Oaxaca (@ImparcialOaxaca) September 1, 2024
Argumento de los familiares
La familia del joven fallecido ha ofrecido una versión diferente de lo ocurrido, según ésta, Diego P., estudiante de la Universidad Anáhuac, fue víctima de uso excesivo de la fuerza por parte de la policía.
Argumentan que, al no detenerse de inmediato en el retén, los policías abrieron fuego e hiriendo de gravedad al joven, quien falleció horas más tarde en el hospital.
Los familiares también han denunciado que el compañero de Diego P. fue detenido sin haber trasladado directamente a la Fiscalía o presentado al juez municipal. Este actuar, según ellos, es una violación a sus derechos, lo que ha incrementado la desconfianza hacia las autoridades locales.
Un familiar directo denunció la brutalidad con la que los elementos de la Policía Municipal de Santa Lucía del Camino actuaron la madrugada del 31 de agosto.
Según este relato, el estudiante de la licenciatura en Comunicación, fue víctima de un acoso policial que escaló en violencia desmedida, culminando en su asesinato.
Aseguró que al llegar al alcoholímetro instalado enfrente del CBTis 123, fueron acosados por un policía vial, que les exigió dinero para dejarlos pasar, al negarse, el policía comenzó a insultarlos y amedrentarlos, solicitando apoyo de más elementos policiales. Al intentar continuar su camino, fueron perseguidos, lo que provocó que Diego P. perdiera el control del vehículo.
Al estar en alto, “los policías comenzaron a jalonearlos y a golpearlos dentro del auto, forzándolos a bajarse para seguir golpeándolos; y en su violencia sin control, ya amagado le dispararon a quemarropa, añadió que, en un intento por alterar lo ocurrido, fueron a dejar al joven que agonizaba a Ciudad de las Canteras, mientras que a Josué R. M. se lo llevaron detenido con un ojo casi saliéndose de la órbita.
Lamentablemente Diego perdió la vida a causa de la brutalidad y violencia incontrolable con la que actúan los elementos policiacos y viales de Santa Lucia del Camino. Que este homicidio no quede impune, levantemos la voz por Diego P. para que se haga justicia”.
#Entérate | Los padres de Diego Paz exponen su impotencia ante el asesinato de su hijo, quien estudiaba la carrera de comunicación en la Universidad Anáhuac Oaxaca. #Oaxaca pic.twitter.com/gsDqGQusam
— El Imparcial de Oaxaca (@ImparcialOaxaca) September 2, 2024
Avances en la investigación
El presidente municipal, Juan Carlos García Márquez, emitió un comunicado en el que informó que el elemento de la Policía Vial presuntamente involucrado ya se encuentra a disposición de la Fiscalía.
Hecho confirmado por la FGEO en un comunicado donde se señala que el detenido fue identificado como Abraham R. P., elemento de la Policía Municipal de Santa Lucía del Camino.
Además, se informó que se aseguró un arma y se están realizando trabajos forenses en materia de balística para determinar si fue utilizada durante el incidente. Los resultados de estos estudios serán cruciales para avanzar en el proceso judicial.
La Fiscalía aseguró que las investigaciones se realizarán de manera imparcial y objetiva, con el fin de establecer la verdad jurídica y garantizar que se haga justicia.
Por su parte, el estado de salud del comandante de la policía municipal sigue siendo crítico, mientras que el otro policía herido permanece en tratamiento intensivo. Se espera que los resultados de los estudios forenses, que se están llevando a cabo con la colaboración de peritos de diferentes especialidades, proporcionen las pruebas necesarias para determinar el nivel de responsabilidad de todos los involucrados.
El debate público
El caso ha desatado una ola de opiniones divididas en la sociedad oaxaqueña, especialmente en redes sociales, donde se han expresado puntos de vista encontrados. Algunos usuarios defienden la actuación de la policía, argumentando que los jóvenes debieron someterse a la revisión en lugar de intentar escapar y agredir a los agentes. Otros, sin embargo, condenan el uso de la fuerza letal y acusan a la policía de haber reaccionado de manera desproporcionada.
Comentarios en redes sociales reflejan el malestar generalizado: “Porquería de operativos que hacen, solo para sacar dinero y joder al pueblo, solo falta que digan que se disparó por accidente”, “Pues simplemente, si vas en estado de ebriedad y te agarra un alcoholímetro pues ya ni modo, cooperar y dejarte que te pongan a disposición para qué discutir y ponerse a pelear o en su caso querer huir”, “pues que cuesta perder 5 minutos que te revisen, mientras no lleves nada que te comprometa no pasa nada, pero luego hay quienes se ponen a discutir”.
Todos están mal, los policías porque son bien atascados, y uno como ciudadanos, por manejar tomados”, “bien lo dijo Benito Juárez El respeto al derecho ajeno es la paz… solamente se hubiera parado y mostrado sus documentos y hoy estuvieran los 4 en casa”, son algunas de las opiniones que se han difundido ampliamente, evidenciando la división que este caso ha generado.