Si una embarazada tiene diabetes, al nacer su bebé es posible que le surja la duda de si puede amamantarlo de manera normal, la respuesta es que puede hacerlo sin riesgo y a continuación explicamos cómo este proceso beneficia tanto a la mamá como a su hijo.
La Organización Mundial de la Salud resalta los beneficios de la lactancia para el bebé, ya que la leche materna contiene nutrientes que le ayudan a crecer sano y fuerte.
Es probable que si la mamá tiene diabetes le tarde un poco más de lo normal en bajar la leche, pero para solucionarlo es importante ser perseverante e insistir, ya que mientras más amamante al bebé aumentará la cantidad de este líquido.
Beneficios de la lactancia para la mamá y el bebé
Es la importancia de que la mamá con diabetes amamante a su bebé, porque así reduce el riesgo de que él padezca esta enfermedad y otras infecciones comunes, ya que la leche fortalece sus defensas.
La lactancia materna es positiva para las madres diabéticas, ya que tiene un efecto hipoglucemiante, es decir, les ayuda a reducir la cantidad de insulina que necesitan inyectarse.
Esto se debe a que cuando amamantan al menor la glucosa que su cuerpo no puede asimilar se convierte en energía para producir leche y sintetizar la lactosa.
Así que las mujeres con diabetes no deben tener miedo de amamantar a sus hijos, primero porque su producción de leche es igual a la de otras madres y segundo, porque tiene grandes beneficios para ambos.
Sin embargo, un aspecto importante es que la madre necesita tener un mayor control de su índice de glucosa y de la cantidad de insulina que se aplica.
Asimismo, es fundamental que mantenga una ingesta calórica mayor, ya que requiere más energía para producir la leche y si esto no se controla adecuadamente puede causarle una hipoglucemia, que es peligrosa.
Reforzar el lazo afectivo de una madre y su hijo a través de la lactancia es completamente posible y recomendable a pesar de la diabetes, ya que tiene múltiples beneficios para la salud de los dos.