A continuación, te presentamos una serie de ejercicios indispensables para mantener una buena apariencia en los brazos y prevenir o reducir la flacidez en esta zona.
- Flexiones de pared:
- Ponte de pie frente a una pared, a unos 30 cm de distancia.
- Levanta los brazos y coloca las palmas de las manos en la pared, un poco más anchas que tus hombros. Los dedos deben apuntar hacia arriba.
- Mantén las piernas un poco separadas, dobla los codos y acerca el pecho y la barbilla hacia la pared. Esta es la posición inicial.
- Respira profundamente, exhala y empuja la pared hasta que los codos estén ligeramente doblados y el pecho y la barbilla se separen de la pared.
- Inhala y vuelve a la posición inicial. Realiza 3 series de 10 repeticiones.
- Flexiones o lagartijas:
- Acuéstate boca abajo en una colchoneta.
- Coloca las palmas de las manos en el suelo, a la altura del pecho, separadas a la anchura de los hombros. Los codos deben estar doblados y apuntando hacia los pies, y las yemas de los dedos deben apuntar hacia adelante.
- Mantén los pies juntos, flexiona los dedos de los pies y mantén la barbilla hacia abajo, mirando hacia adelante.
- Desde esta posición, cuenta 3, 2, 1 y estira los codos levantando el cuerpo. Mantén la cabeza alineada con los talones, mirando hacia abajo, como si estuvieras en una plancha.
- Exhala, flexiona los codos y baja el pecho y la barbilla a la posición inicial.
- Realiza series de 8 a 10 repeticiones para obtener resultados visibles.
Recuerda combinar estos ejercicios con una alimentación equilibrada, rica en nutrientes y baja en grasas saturadas, así como mantener una rutina regular de actividad física que incluya ejercicios cardiovasculares y de fortalecimiento muscular. Consulta siempre con un profesional de la salud antes de iniciar cualquier programa de ejercicio.
Mantén la constancia y verás cómo tus brazos se fortalecen y adquieren un aspecto más tonificado con el tiempo. ¡No te rindas y disfruta de unos brazos más firmes y definidos!