Nunca queda rastro de su labial en los dientes
El color rojo es una de las tonalidades preferidas por las francesas, pero nunca queda rastro de labial en sus dientes.
¿El truco? Una vez aplicado el lipstick, coloca el dedo índice entre tus labios para retirar el exceso.
No eligen la base de maquillaje incorrecta
Nuestras parisinas favoritas nunca llevarán esa línea antiestética de la base de maquillaje en la mandíbula, lo que muestra la diferencia entre el tono real de la piel (que queda al descubierto en el cuello) y el tono de la base de maquillaje.
NO a las cejas depiladísimas
Las francesas se olvidan de las pinzas de depilar por un tiempo. Les encanta preservar ese aspecto natural de sus cejas crecidas, pero siempre aseadas.
Así que, si vas a emularlas, asegúrate de peinarlas con un cepillo de cerdas naturales para que luzcan perfectas.
No al contouring
Difícilmente encontrarás a francesas con una nariz contorneada a la perfección y con los pómulos brillantes como el sol.
Ellas prefieren sacarles provecho a sus partes favoritas del rostro y el resultado termina siendo mucho más natural.
No duermen maquilladas
Si te preguntas por qué las francesas suelen verse tan bien con apenas el mínimo maquillaje, es porque tienen rutinas de belleza estrictas.
Nunca van a la cama sin desmaquillarse y sin aplicarse la crema adecuada para su tipo de piel.
No usan calor para peinar su cabello
Pues están conscientes de lo mucho que el calor afecta al cabello.
En su lugar, aplican aceites especiales en el cabello para mantener el frizz a raya y lo peinan en su forma natural.
Nunca descuidan sus uñas
¿Has visto a alguna francesa con las uñas en mal estado? Se hacen la manicura una vez por semanas, y aplican una base fortalecedora antes del color.
Terminan sellando el esmalte con una capa de secado rápido.