De acuerdo con propietarios de tortillerías asentadas en el sur del estado, en las últimas semanas no encuentran maíz híbrido en la región, por lo que han tenido que buscar otras alternativas para conseguir el producto e incluso viajar hasta la Central de Abasto en la Ciudad de México.
“Apenas es medio año y ya no hay grano en la región, mientras que el que nos traen de Sinaloa también ha empezado a escasear”, señaló Manuel, dedicado a la producción y distribución de tortillas, al afirmar que al igual que sus compañeros se encuentran preocupados por la situación que pudiera presentarse en los próximos meses.
Esta problemática la están viviendo empresarios de los municipios de Acatlán, Petlalcingo, Chila de las Flores, Tehuitzingo, Tulcingo de Valle, entre otros, ubicados en la franja limítrofe con los estados de Oaxaca y Guerrero. Aunque entre ellos hubo empresarios que se prepararon con anticipación, almacenando el grano y son quienes han podido continuar la producción.
Otro de los entrevistados refirió que en la última semana el bulto de maíz con 50 kilos costó entre los 800 y 1000 pesos, cuando antes de la pandemia -hace dos años- el bulto estaba en 400 pesos. “Ya se encuentra al doble o más del doble”, refirió.
Los industriales señalaron que, de continuar la escasez del maíz, no tendrán más remedio que aumentar el costo del kilo de la tortilla que en marzo de este año alcanzó los 19 y 21 pesos en el municipio de Acatlán.
La situación del campo es otro de los factores que analizan los productores de la masa y la tortilla, pues temen que se agrave la sequía y además los agricultores han alertado del atraso en las siembras de la zona, lo que representa que en caso de comenzar las lluvias este mes o principios del otro, las cosechas podrían obtenerse hasta finales del año.