En el contexto actual de México, a pesar de los avances significativos reportados durante el presente sexenio en cuanto a la reducción de la pobreza y el incremento del salario mínimo, persiste una profunda desigualdad entre las diferentes clases sociales. Un amplio segmento de la población aún se encuentra en la clase baja, caracterizada por los menores ingresos y condiciones de vida más precarias.
BRECHA SOCIAL EN MÉXICO: DATOS DEL INEGI
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reveló recientemente que un 56.6% de los mexicanos se sitúa en la clase baja. Por otro lado, el 42.2% de la población se clasifica como clase media, dejando solo al 1.2% en la clase alta. Estas cifras reflejan una estructura social con marcadas diferencias en términos de ingresos y acceso a servicios.
CLASIFICACIÓN DE LAS CLASES SOCIALES
El INEGI clasifica las clases sociales en México de la siguiente manera:
Clase Baja: Abarca al 56.6% de la población. Este grupo enfrenta ingresos limitados, condiciones de vida más precarias y menor acceso a servicios básicos y oportunidades de educación y empleo.
Clase Media: Representa el 42.2% de la población. Las personas en esta categoría tienen ingresos moderados, mejor acceso a servicios educativos y de salud, y una mayor estabilidad laboral y económica.
Clase Alta: Comprende solo el 1.2% de la población, disfrutando de altos ingresos, un nivel elevado de vida, acceso a servicios de lujo, y mayores oportunidades educativas y laborales.
DISTRIBUCIÓN DE INGRESOS MENSUALES SEGÚN LA AMAI
La Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercados y Opinión Pública (AMAI) ofrece una distribución detallada de los ingresos mensuales de acuerdo a las clases sociales:
Clase Alta: Más de 100,000 pesos
Clase Media Alta: Entre 45,000 y 50,000 pesos
Clase Media: Entre 30,000 y 40,000 pesos
Clase Media Baja: Entre 9,000 y 18,000 pesos
Clase Baja Alta: Entre 4,500 y 9,000 pesos
Clase Baja: Menos de 4,000 pesos
Además, estas categorías ponen en evidencia las significativas disparidades en ingresos, acceso a servicios y oportunidades de desarrollo entre los distintos grupos sociales en México.
REDUCCIÓN DE LA POBREZA EN EL ÚLTIMO AÑO
Por otra parte, a pesar de la prevalencia de la clase baja, las estadísticas señalan una reducción en la pobreza durante el último año. La pobreza, entendida como la incapacidad de los hogares para cubrir la canasta básica alimentaria con los ingresos de sus miembros, disminuyó del 37.7% al 35.8% entre el primer trimestre de 2023 y el mismo periodo de 2024.
Además, esta mejora se atribuye a factores como el aumento en el empleo, con 628.8 mil personas adicionales trabajando, y un incremento del 7.2% en el ingreso laboral real per cápita, según datos recientes del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Sin embargo, aunque los esfuerzos gubernamentales han logrado avances en la reducción de la pobreza y el aumento del salario mínimo, la brecha entre las clases sociales en México sigue siendo amplia. La mayor parte de la población continúa en la clase baja, reflejando la necesidad de políticas más inclusivas que promuevan una distribución más equitativa de los ingresos y oportunidades. La lucha contra la desigualdad social sigue siendo uno de los desafíos más grandes para el país.