Durante su reciente gira por el estado de Veracruz, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue blanco de una agresión. Luego que un manifestante le lanzó una botella de agua mientras se dirigía a un evento en el puerto jarocho. Este incidente ha generado controversia. Ya que, el autor de la agresión, según ha confirmado el propio mandatario, es un abogado vinculado a la oposición a la reforma del Poder Judicial, recientemente aprobada.
UNA PROTESTA QUE ESCALÓ A LA AGRESIÓN
El hecho se registró el pasado 22 de septiembre en las inmediaciones del Centro Cultural “Leyes de Reforma”, en el puerto de Veracruz. Lugar donde AMLO encabezaría un evento oficial. Al descender de la camioneta en la que viajaba, el mandatario fue recibido por un grupo de manifestantes que expresaban su desacuerdo con la reforma judicial. Entre los gritos de “dictador” que lanzaban algunos inconformes, una botella de agua fue arrojada desde la multitud. La cual pasó muy cerca de López Obrador y su equipo de seguridad.
Elementos de seguridad reaccionaron rápidamente, protegiendo al presidente y escoltándolo hasta el recinto donde se celebraría el evento. Con ello, poniendo fin al incidente sin que el jefe del Ejecutivo resultara herido.
UN ABOGADO EN DESACUERDO CON LA REFORMA JUDICIAL
Durante su conferencia matutina, realizada desde el Salón de la Tesorería en Palacio Nacional, López Obrador confirmó que el responsable de arrojar la botella es un abogado, presuntamente vinculado a una red de tráfico de influencias en el Poder Judicial. El presidente lamentó que la reforma, que busca modificar y combatir ciertos aspectos del sistema judicial, haya generado tanta molestia en algunos sectores. Especialmente entre quienes, según él, se benefician del sistema actual.
“Ahora que fui a Veracruz, uno de los que me tiró la botella de agua es un abogado. Está vinculado a la red de traficantes de influencias en el Poder Judicial. Por eso están tan enojados, y lo lamento. Ojalá se serenen”, expresó el mandatario.
CONTEXTO DE LA REFORMA AL PODER JUDICIAL
La reciente reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF) ha sido uno de los temas más polémicos en los últimos meses. La propuesta ha sido defendida por López Obrador como un paso necesario para eliminar la corrupción y el nepotismo dentro del sistema judicial. Sin embargo, sectores del propio Poder Judicial, entre ellos jueces y abogados, han mostrado su descontento, asegurando que la reforma afecta la autonomía y operación del PJF.
El incidente en Veracruz es visto como una manifestación más de este descontento. Los manifestantes, quienes presuntamente eran trabajadores del Poder Judicial, encabezaron la protesta contra el mandatario como una forma de rechazo a las modificaciones legislativas impulsadas por su gobierno.
REACCIONES POSTERIORES
La agresión ha provocado reacciones encontradas. Mientras que algunos sectores han criticado el hecho de que la protesta escalara a un acto violento, otros han interpretado el incidente como una muestra del creciente malestar social ante las decisiones del gobierno federal, en particular en torno a la reforma judicial.
Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente, salió en defensa de López Obrador a través de redes sociales. Donde también criticó a los manifestantes. “Para dictadores, Porfirio Díaz”, señaló en una clara alusión a las acusaciones que se le hicieron a su esposo durante la manifestación.
INVESTIGACIÓN EN CURSO
Aunque el hecho no pasó a mayores, se ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias del incidente y determinar si existe alguna responsabilidad penal por parte de los manifestantes. Hasta el momento, no se ha confirmado si el abogado que lanzó la botella enfrenta cargos legales, pero las autoridades continúan revisando lo sucedido.
El doble impacto del incidente, tanto en términos de seguridad presidencial como de descontento social, mantiene el foco sobre el clima político en torno a la reforma del Poder Judicial. Uno de los temas más candentes en la agenda del gobierno actual.