A dos días de la Marcha Nacional que conmemora el 10° aniversario de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal “Isidro Burgos” de Ayotzinapa, el Senado de la República ha sido “amurallado” con vallas metálicas y cadenas. Esta medida busca garantizar la seguridad del recinto legislativo ante temores de una posible toma violenta, similar a la que ocurrió el pasado 10 de septiembre por parte de empleados del Poder Judicial.
Al respecto, el presidente de la Cámara de Senadores, Gerardo Fernández Noroña, emitió la instrucción de restringir el acceso al recinto únicamente a senadores y personal de enlace legislativo. En un comunicado en el sitio web del Senado, Fernández Noroña enfatizó que esta acción se toma “con la finalidad de garantizar el desarrollo libre y seguro de las sesiones”.
Desde la noche del lunes, se iniciaron las labores de colocación de vallas de seguridad en los alrededores del Senado, el cual está fuertemente resguardado por elementos de seguridad pública. Esta decisión se da en un contexto de creciente tensión, después de que simpatizantes del movimiento Ayotzinapa lanzaran una veintena de petardos hacia la Secretaría de Gobernación el lunes.
La Marcha Nacional, que se llevará a cabo el jueves y recorrerá del Ángel de la Independencia al Zócalo, pasará frente al Senado, lo que ha generado aún más precaución en las autoridades.
En la sesión de este martes, el Pleno del Senado revisó en primera lectura el dictamen de la reforma constitucional que transfiere el control de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Se espera que la enmienda sea aprobada con mayoría calificada a más tardar el miércoles 25 de septiembre, y posteriormente será turnada a los congresos de los estados para su validación.
El senador por Zacatecas, Saúl Monreal, justificó la instalación de las vallas como una medida necesaria para proteger la integridad del inmueble, de los legisladores y empleados.
El presidente de la cámara tiene la obligación de resguardar la integridad de todos los senadores. No es tanto por temor, sino por la responsabilidad que tiene”, destacó Noroña, subrayando que las decisiones legislativas actuales podrían confrontar diversos intereses, lo que hace crucial el resguardo del Senado.