No existen políticas públicas para proteger a los actores políticos frente a las próximas tomas de protesta de diversos cargos en octubre, alertó la organización México Evalúa.
Cabe resaltar que Armed Conflict Location and Event Data (ACLED), Data Cívica, México Evalúa y Animal Político presentaron un balance de la violencia político-criminal y sus implicaciones en la democracia de México.
En el documento citaron que la elección de 2024 registró mayores niveles de violencia que los procesos electorales de 2018 y de 2021.
Aunado a que la violencia político-criminal no se ha detenido tras la elección del primero de junio; se registraron 19 ataques durante los primeros 15 días de ese mes; sin embargo, ya no existen medidas de protección para resguardar a los actores políticos.
De acuerdo con el Índice de Conflictos elaborado por ACLED, México se mantuvo como el país más peligroso del mundo para civiles en 2023, y según las mediciones de Exposición a Conflictos más de 43 millones de personas estuvieron expuestas a violencia política en México durante ese año.
Al respecto, Sandra Pellegrini, especialista para América Latina, comentó que en México el panorama de conflictos está fragmentado, debido a la proliferación de grupos armados no estatales que generan violencia que afecta mayormente a la población civil y deriva en altos niveles de letalidad.
Te puede interesar: Valles Centrales, la región con más denuncias durante las elecciones
Tiziano Breda, coordinador asociado de análisis para América Latina, resaltó que el proceso electoral de 2023-2024 fue marcado por uno de los más altos niveles de violencia contra figuras políticas registrados desde 2018, en particular contra funcionarios y aspirantes a cargos locales.
Aunque la competencia entre grupos del crimen organizado impulsa gran parte de la violencia política, al menos el 30% de los incidentes incluyeron disturbios y destrucción de propiedades, lo que sugiere que las luchas de poder locales y los reclamos comunitarios de irregularidades durante el proceso, o el rechazo de los resultados, también pueden desencadenar violencia contra figuras políticas.
Datos del monitoreo de Votar entre Balas, de Data Cívica, dan cuenta de 130 personas aspirantes, precandidatas y candidatas, que fueron atacadas presuntamente por grupos del crimen organizado durante el pasado proceso electoral, entre el 7 de septiembre de 2023 y el 2 de junio de 2024. De éstas, 34 fueron asesinadas, 40 sobrevivieron a atentados, 32 recibieron amenazas tangibles (en mantas, videos, u otras que provocaron la renuncia a la candidatura), 10 personas candidatas fueron secuestradas, y en 14 ataques armados la persona candidata sobrevivió pero alguien más murió.
Además de los asesinatos, es importante visibilizar otros ataques por parte del crimen organizado a candidatos y a otros actores políticos durante el proceso electoral”, apuntó Itzel Soto, coordinadora del proyecto Votar entre Balas de Data Cívica.
En el análisis estadístico enfocado en la reducción de participación electoral de los municipios con mayor concentración de violencia político-criminal, elaborado por México Evalúa, por cada ataque contra autoridades a nivel municipal, la participación se redujo, en promedio, en dos puntos porcentuales en la elección local en la jornada electoral de junio de 2024.