Cada vez son más los oaxaqueños que exigen al magisterio terminar con su paro de labores y regresar a las aulas a terminar el ciclo escolar ante el grave daño a la educación de miles de niños y jóvenes en nuestro estado. A pesar de que el gobierno federal y la administración han hecho todo por beneficiar al magisterio en general, los daños son muy severos, pues se resisten a levantar su paro de actividades.
Diversos sectores sociales lamentan que a través del IEEPO se haya concedido muchas cosas, como continuar con la basificación del personal docente y administrativo, así como el pago de las vacancias pendientes, y no haya una actitud recíproca para regresar a la escuela.
De ahí la insistencia de que los trabajadores de la educación terminen con sus movilizaciones y no sean los intereses de grupos o políticos los que se impongan en franco deterioro de la educación de los oaxaqueños. Todos ellos no pueden negar que se han cumplido sus exigencias, ya no hay motivos para extender más su movilización o radicalizarse, pues sería muy lamentable que esto sucediera.
Si bien es cierto hay temas que insisten en abordar como la abrogación de leyes, todo esto debe ser a través de los canales oficiales, sin presiones de ningún tipo ni actitudes chantajistas para empezar a cambiar estos métodos de lucha magisterial que solo provocan un serio deterioro en la educación de las nuevas generaciones y perjudica la economía de los habitantes de una entidad tan llena de carencias y necesidades.
Se debe insistir a los integrantes del sindicato de los trabajadores de la educación a no caer en la provocación de grupos radicales que en estos momentos electorales buscan desestabilizar al movimiento magisterial. Como también a las autoridades a no caer en las presiones y el chantaje de quienes buscan alcanzar algún beneficio ajeno a los propios intereses de la colectividad.
Menos alimentos
México enfrenta la peor sequía desde 1957, ya que el 79.3% de los municipios con sequía a diversos niveles y 12 estados la enfrentan al 100% y en estos momentos ya afecta los precios del frijol y del azúcar, otros productos no están exentos de nuevos ajustes, aunque a escala internacional su precio ha retrocedido, como en el caso del maíz.
La sequía está impactando los precios principalmente de azúcar y frijol, y el estrés hídrico y el intenso calor podrían comprometer el abasto de alimentos y con ello aumenta el riesgo de que los precios de los productos básicos vuelvan a subir y donde Oaxaca se verá seriamente afectado.
Con la información que se tiene y las herramientas que permiten generar estrategias de planeación y atención ante estos fenómenos adversos, surge la necesidad, como sociedad, de comprenderlos mejor y de poner atención a las estrategias que deben implementarse ante esta contingencia.
El clima extremo puede provocar que las cosechas en México no sean tan productivas como en años anteriores, lo que incide en la oferta del producto y en los precios, es decir, en la inflación, con lo cual, la batalla de los Bancos Centrales por reducirla, la cual inició en 2022, podría tomar más tiempo y requerir de tasas elevadas.
La sequía podría afectar la producción, eso obviamente tendría un impacto en los precios y en el consumo. Según el estudio Swiss Re Instituto, se espera que este año ocurra un evento poco común: una rápida transición del fenómeno climático conocido como El Niño, que terminaría este mes, a La Niña, que comenzaría con sus efectos a finales del verano.
Durante El Niño, México enfrenta condiciones de sequía en diversas regiones, disminuyendo la disponibilidad de agua para riego y afectando negativamente cultivos como el maíz, el trigo y las hortalizas. La Niña trae condiciones más húmedas, que pueden causar inundaciones y un exceso de humedad en el suelo.