El perfil de un serial killer es complejo. Nadie sabe a ciencia cierta cómo es que un asesino serial se convierte en tal. Hay patrones y antecedentes en común que se interrelacionan, pero estos sujetos a menudo desafían toda lógica y certeza. Una historia de maltratos, abandonos y abusos (o hasta un apego enfermizo) a menudo se considera como factor clave para que una mujer u hombre comience una carrera homicida. Para ilustrar lo anterior, te contaremos la historia de cuatro asesinos seriales y la relación con sus madres.
Mary Bell y el día en que su madre dijo: “¡Aleja esa cosa de mí!”
El caso de esta menor de edad es uno de los más notorios en la historia del crimen.
El nombre de Mary Bell llegó a los periódicos después de estrangular a dos niños pequeños a la edad de 11 años.
Su pasado fue determinante para lo que hizo: cuando nació, las primeras palabras de su madre fueron: “¡Aleja esa cosa de mí!”. Este rechazo se hizo común a lo largo de la relación con su progenitora. Bell pasó gran parte de su infancia al lado de familiares que se hacían cargo de ella por petición de su madre.
El rechazo de la mujer por Mary era tan grande que incluso le daba con frecuencia medicamentos que la hacían enfermar.
Tras cumplir condena, Mary Bell salió en libertad y hoy vive en completo anonimato.
Charles Manson, el niño rechazado
Comencemos diciendo que Charles Manson no fue un asesino en serie, pero su caso fue tan perturbador que a menudo se le menciona en las historias más notorias de la crónica negra. Su madre, Kathleen Maddox, tenía 16 años cuando nació Manson. Desde un principio, la adolescente no quiso hacerse cargo de su hijo.
Los biógrafos de Manson cuentan que un día Maddox intentó intercambiarlo por una jarra de cerveza con una mujer que quería adoptar un niño. El tío de Charles tuvo que localizar a la mujer para traerlo de vuelta a casa.
Maddox acabó dejando a su hijo en una especie de orfanato, pero éste escapó para volver con ella. Manson vivió en la calle durante la mayor parte de su infancia, lo que le llevó a la cárcel desde su adolescencia.