De los 32 congresos locales que existen en México, 24 cuentan con el servicio profesional de carrera en su legislación, pero solo 4 lo aplican, en tanto Oaxaca es uno de los 8 estados que se encuentra en color rojo al no contar con esta normatividad.
Ante la falta de un servicio parlamentario de carrera, los congresos locales como como ocurre en la entidad, se han convertido en una agencia de colocación de familiares y amigos que conllevan a una mayor burocracia.
De acuerdo con el informe Legislativo 2018 del Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (IMCO), el acceso a personal parlamentario profesional e independiente es el recurso más valioso con el que un parlamentario puede contar.
El marco normativo el servicio profesional de carrera (SPC), considera factores importantes como ingreso por concursos, capacitación continua, promoción al interior de las legislaturas, así como derechos y responsabilidades laborales.
El documento del IMCO señala que los congresos locales tienen la responsabilidad de hacer rendir cuentas al Ejecutivo estatal sobre la ejecución de políticas públicas, el control del gasto y la aprobación del presupuesto, pero ante la falta de la profesionalización de los trabajadores esto no ocurre.
Apenas ocho congresos locales consideran centros de estudios de finanzas públicas en su ley orgánica. El resto de las legislaturas no cuentan con la debida capacidad técnica para detectar con oportunidad variaciones injustificadas de gasto y llamar a la rendición de cuentas a los funcionarios responsables.
En 2017, desde la entrada de la 63 Legislatura local, donde la mayoría de los diputados son del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en Oaxaca no se publicó ninguna convocatoria a concursos para ocupar cargos públicos.
Ante ello, los actuales diputados recurrieron a dar empleo a sus familiares, amigos, colaboradores y personas que no tienen preparación suficiente para poder laborar en el Poder Legislativo.