Encargados de Cooperativas Escolares esperan conocer los detalles de la modificación a la ley por la que se prohíbe la venta de bebidas azucaradas y alimentos con alto contenido calórico a los niños, dado que esperan el desplome de ventas al 60%.
Y es que ayer, con 31 votos a favor, el Congreso local aprobó la iniciativa de ley con la que se prohíbe la venta de bebidas azucaradas y comida chatarra a menores de edad.
De acuerdo con autoridades de salud, la mala alimentación ha sido la causa fundamental de problemas de sobrepeso, obesidad y enfermedades crónicas en infantes.
La reforma al Artículo 20 Bis de la Ley de los Derechos de Niñas Niños y Adolescentes, establece: la prohibición, distribución, donación, regalo, venta y suministro de bebidas azucaradas y alimentos envasados con alto contenido calórico a menores de edad.
El ordenamiento prohíbe la instalación de máquinas expendedoras de golosinas y refrescos en toda la entidad, además la venta y suministro de bebidas azucaradas y alimentos envasados de alto contenido calórico en escuelas públicas y privadas de educación básica y media superior.
Sin embargo para Carmen Mendoza, quien se ha dedicado por más de 10 años a la venta de tortas, tostadas, jugos y golosinas en una de las escuelas primarias de Santa Lucía del Camino, el panorama no es nada alentador.
“Hasta antes de la pandemia y que los alumnos se fueran a sus casas vendía entre 200 y 300 pesos al día, pero con la nueva ley y si no nos dejan vender golosinas y refrescos, si saco 100 o 150 pesos ya es mucho”.
La madre de familia coincide en cuidar la salud de los infantes, pero también advierte una seria afectación en los ingresos de quienes ven en la venta de estos productos una fuente de ingresos.