Dos militares que se desplazaban en un vehículo marca Nissan, tipo Tsuru, fueron detenidos y trasladados a los separos municipales por agredir a la autoridad.
Los uniformados que circulaban en presunto estado de ebriedad ponían en riesgo a la ciudadanía, motivo por el cual elementos de la Policía Vial tuvieron que pedir refuerzos, ya que los ebrios sujetos comenzaron a agredir e insultar.
Sin embargo, mientras esperaban a la grúa para llevar al encierro el vehículo en cuestión, una camioneta arribó al lugar con más militares, en donde uno se identificó como capitán, y con insultos amagó a un Policía Vial para que sus colegas no fueran detenidos.
Ante esta amenaza, el policía pidió nuevamente el apoyo, pero antes de que llegaran, el supuesto capitán huyó del lugar.