La mañana de este domingo 18 de agosto, un deslave de grandes rocas en la carretera Oaxaca-Tehuacán provocó serios destrozos en varios vehículos y generó un caos en la circulación de la autopista en ambos sentidos.
El incidente se reportó a la altura del kilómetro 90 de la supercarretera 135D, la cual conecta la ciudad de Oaxaca con Tehuacán, Puebla. Las enormes rocas cayeron sobre un camión de transporte de alimentos, afectando gravemente la zona del motor, que quedó prácticamente destruida por el impacto. Afortunadamente, no se reportaron víctimas mortales hasta el momento.
TRÁNSITO INTERMITENTE Y ATENCIÓN AL INCIDENTE
Caminos y Puentes Federales de Ingresos y Servicios Conexos (Capufe) informó que la circulación sigue siendo intermitente en ambos sentidos de la autopista, debido al derrumbe del talud. Los servicios de emergencia trabajaron en el lugar para atender a los afectados y remover los escombros que obstaculizan el paso.
ALTERNATIVAS VIALES PARA EVITAR RETRASOS
La Secretaría de Gobernación recomendó a los conductores que se dirigen al estado de Oaxaca desde el centro del país tomar rutas alternas. La sugerencia es ingresar por el Arco Norte en San Martín Texmelucan, seguir por la Autopista 150D México-Veracruz hasta la desviación hacia Tehuacán, utilizando esta ciudad como punto de distribución hacia diversos destinos dentro de Oaxaca.
RECOMENDACIONES ANTE UN DESLAVE EN CARRETERA
En caso de enfrentar un derrumbe mientras conduces, lo más importante es mantener la calma. Detén el vehículo a una distancia segura y enciende las luces de emergencia. No intentes cruzar ni remover los escombros por ti mismo. Si es posible, advierte a otros conductores del peligro y llama al número de emergencias 911, proporcionando la ubicación exacta del incidente. Sigue las indicaciones de los servicios de emergencia y espera en un lugar seguro hasta que lleguen las autoridades.
Este tipo de situaciones, aunque desafortunadas, nos recuerdan la importancia de estar siempre atentos al viajar por carretera, especialmente en temporadas donde las condiciones climáticas pueden generar riesgos adicionales como deslaves y derrumbes.