Los bosques de agua, ecosistemas forestales ubicados en zonas de alta montaña, son cruciales para la captación, filtración y almacenamiento de agua. Estos bosques permiten que el agua de lluvia se infiltre en el suelo, recargue los acuíferos y alimente los ríos y lagos, además de contribuir a la regulación del ciclo hidrológico, la protección contra la erosión del suelo y la conservación de la biodiversidad. Ejemplos de bosques de agua incluyen los páramos andinos y las selvas nubladas.
PERDIDA DE BOSQUES
México ha perdido aproximadamente 100 mil hectáreas de bosques por año durante la última década, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Esta pérdida se debe principalmente a la deforestación causada por actividades agrícolas, la expansión urbana, la tala ilegal y los incendios forestales.
En respuesta a esta alarmante situación, diputados del partido Movimiento Ciudadano (MC) han presentado una iniciativa para reformar la Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección Ambiental. La propuesta busca incluir el concepto de bosques de agua y otorgar facultades a las entidades federativas para ejecutar acciones de preservación y protección de estos ecosistemas. La propuesta fue turnada a la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales para su dictamen.
INICIATIVA DE LEY
La iniciativa incluye la creación de un nuevo capítulo en la ley, titulado “De la preservación y protección de los bosques de agua”, que establece la necesidad de implementar puntos de monitoreo permanente para evaluar el estado de los ecosistemas y especies, y detectar áreas con riesgos de pérdida y deterioro de biodiversidad y otros recursos naturales.
Los legisladores Braulio López Ochoa Mijares y Carlos Alberto León García destacaron la importancia de reconocer los bosques de agua como zonas boscosas que conectan dos o más regiones, contienen alta biodiversidad y son vitales para la provisión de recursos hídricos y otros servicios ambientales. Además, proponen incluir el concepto de cambio climático definido como el cambio en el clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana, alterando la composición de la atmósfera mundial, más allá de la variabilidad natural del clima.
En el documento se estipula que será responsabilidad de las entidades federativas formular y llevar a cabo acciones de preservación y protección de estos bosques de agua. Asimismo, se destaca la importancia de suscribir convenios de colaboración o coordinación administrativa entre entidades cuando un bosque de agua se sitúe en varias jurisdicciones, como contempla el artículo 13 de la ley actual.
PLANES DE REAHABILITACIÓN Y MANTENIMIENTO
Los diputados de MC también sugieren elaborar e implementar planes de manejo para la rehabilitación y mantenimiento de estos bosques, incluyendo medidas específicas para especies prioritarias de fauna y vegetación. Propone además programas de restauración forestal para incrementar la sostenibilidad de la operación forestal, priorizar pagos por servicios ambientales y promover la conectividad entre áreas naturales protegidas.
Durante la exposición de motivos, los legisladores argumentaron la trascendental función de los bosques de agua en la provisión de recursos hídricos, citando como ejemplo una extensa área boscosa en México que abarca partes de la Ciudad de México, Morelos y el Estado de México, conocida como bosque de agua.
La propuesta subraya la necesidad de tomar medidas urgentes y permanentes para garantizar la disponibilidad de agua ante factores como el cambio climático, el crecimiento poblacional, la sobreexplotación de acuíferos, la deforestación y la variación en las precipitaciones, así como otros problemas relacionados con la gestión del recurso hídrico y la infraestructura.
Estos ecosistemas son esenciales para el equilibrio ecológico y la sostenibilidad de la vida en México, y su protección es un imperativo para las generaciones futuras.