En entrevista, el presidente municipal, Elmer Gaspar Guerra, externó que las variedades como azul, morado y rojo son las de mayor demanda entre los clientes, principalmente restaurantes gourmet.
Y es que la comunidad indígena ubicada a 34 kilómetros de la capital del estado, guarda celosamente los secretos para preservar los granos de maíz que ha conquistado paladares y el gusto por las tortillas de colores.
Incluso explicó que para el próximo año se organizarán autoridades municipales, estatales y mujeres productoras para lanzar harinas de maíz, pero de los diversos colores.
“Sin duda que será un éxito para productores hombres y mujeres, quienes todos los días trabajan en el campo y luego en la elaboración de tortillas tlayudas, mismas que tienen gran demanda”, comentó.
Gaspar Guerra dijo que la empresa comunitaria es un área de oportunidades para los habitantes de Zegache, dado que es una fuente de empleo y de generación de recursos para las familias.
Aunado a que a través de las dependencias estatales y federales, así como instancias de investigación han impulsado labores de siembra y mejores prácticas de conservación de semillas criollas.
Zegache significa en zapoteco “Siete mogotes”, se compone de Zet: “mogote” y gache: “siete”, es una comunidad rural en donde más del 50% de su población o más ha salido al norte del país o a los Estados Unidos a buscar mejores niveles de vida.