Pavel Palacios, director de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) en Oaxaca, señaló que un buen número de especies salvajes han regresado a sus hábitats en los diferentes ecosistemas de Oaxaca, como consecuencia de la ausencia de personas en los espacios en que desarrollan su vida silvestre, gracias a la cuarenten a por el coronavirus.
Uno de los ejemplos claros -detalló- fue el regreso de ejemplares de cocodrilo a la playa Ventanilla, localizada en la costa oaxaqueña, perteneciente a Santa María Tonameca.
De acuerdo al funcionario federal la recomendación federal de la cuarentena para prevenir el contagio de coronavirus en el país ha generado que animales puedan ser observados en sitios en donde antes no lo hacían.
Externó que la reducción de actividad humana en sitios con riqueza ecológica, boscosa y de playa, ha tenido un buen impacto en la fauna, dado que los animales vuelven a recorrer los territorios naturales que ocupaban.
“Tenemos que ver el lado positivo para la naturaleza y la fauna o la flora, el medio ambiente en general sobre este aislamiento generado por el Covid, le estamos dando un respiro a la naturaleza”, apuntó.
Es importante mencionar que desde hace poco más de un mes, la actividad turística y comercial se ha detenido, incluido en las playas del estado en donde autoridades municipales se han unido para frenar la llegada de turistas.
Por lo que visitantes e incluso pescadores se han alejado de la zona, lo cual generó el retorno de los animales a su hábitat natural.
Los cocodrilos fueron captados asoleándose en la playa cerca del mar.
Una semana antes, pescadores reportaron también ejemplares en la zona de Santa María Colotepec, en la cercanía de Puerto Escondido, por lo que capturaron al reptil y lo llevaron a la barra de Colotepec.
Ahí, la Procuraduría General de Protección al Medio Ambiente (Profepa) planeaba crear una reserva federal que permitiera alojar a los animales y mantener un centro de control y registros.