Como cada año, cerca de un millón de tortugas arriban a los santuarios ubicados en playas de Oaxaca, para lo cual, diversas instancias de gobierno mantienen acciones de protección.
Y es que desde enero del presente año, dos playas fueron decretados como santuarios: La Escobilla y Chacahua, mismas que se consideran como las predilectas de las tortugas para desovar.
El proyecto fue impulsado por la Semarnat y es parte de un total de 17 santuarios que se han erigido en México, en una extensión de mil 767.21 hectáreas; además de Oaxaca, los santuarios fueron repartidos en las playas de Sinaloa, Jalisco, Michoacán, Guerrero, Chiapas, Quintana Roo, Tamaulipas y Yucatán.
De acuerdo a la dependencia federal, el objetivo es frenar el tráfico ilegal de huevos y carne de tortuga marina, el cual ha registrado un incremento en los últimos años.
Tan solo en los últimos 17 años se han protegido a 35 millones de nidos y se han liberado 650 millones de crías gracias al Programa Nacional de Conservación de Tortugas Marinas.
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Mientras que a nivel estatal, en la playa la Escobilla hace un año arribaron aproximadamente un millón de tortugas golfinas; las tortugas han ocupado 6 kilómetros de playa para poner sus huevos.
A través de un reporte del santuario de tortugas de Oaxaca, indica que aproximadamente unas 271 mil tortugas hembras, llegan en las arribadas por lo cual se espera una eclosión importante.
En su experiencia, cada tortuga es capaz de poner hasta 100 huevos y enterrarlos en la arena.
Sin embargo, los meses de mayor actividad se registra año con año en los meses que va de octubre, noviembre y una parte de diciembre, por lo cual es importante mantener el equilibrio y la protección de los quelonios en los santuarios.
Instancias federales mantienen presencia y operativos constantes para inhibir la recolección ilegal de los huevos de las tortugas, dado que la comercialización se encuentra penada por la ley.