Es muy común que en épocas de verano o de calor, el insomnio se haga más frecuente, que no podamos descansar tanto o que nuestro sueño sea mucho más ligero. Esto, entre otras cosas porque el calor no nos deja dormir. Es por eso que muchas personas deciden dormir destapadas.
Pero esta decisión puede traer consecuencias contraproducentes, porque las personas que lo hacen pueden despertar con la sensación de haber pasado frío durante la noche y también su salud se puede ver afectada. La recomendación es que si tienen calor, se cubran con al menos una sábana ligera, pero que no queden completamente descubiertos.
El dormir tapados no sólo sirve para evitar sufrir por el frío, también tiene que ver con la regulación de la temperatura corporal. Durante el sueño, nuestro cuerpo no responde de la misma forma ante los estímulos del entorno, es decir, a la temperatura del ambiente. La cobijas ayudarán a que el cuerpo se mantenga en una temperatura favorable, mientras que el cerebro descansa y ya no se preocupa por esa función.
El problema de dormir destapado
Pero no todos los organismos responden de la misma forma en las noches, ni todos producen el mismo calor corporal. Por ejemplo, las personas con sobrepeso tienen menos pérdida de calor al acostarse. Pero en otros casos, la regulación puede ser menos efectiva.
En la fase de sueño REM, el cuerpo pierde la capacidad de regular su propia temperatura, esto porque muchas de las funciones que tiene se mecanizan para poder tener un mejor descanso. Por eso, para mantener el calor corporal, necesitamos utilizar medios ajenos a nuestro cuerpo, como puede ser una cobija o una sábana.
No importa si se trata de un clima tropical o es verano. En la madrugada, la temperatura desciende y nuestro cuerpo necesitará de ayuda externa para mantenerse en una temperatura saludable. Por esa razón, aunque tengamos calor o parezca que no lo necesitamos, es muy importante mantenerse tapados en la noche, al menos con una sábana ligera.