Muy contenta y agradecida con la vida fue como la estimada Roselia Chaca festejó su onomástico.
La celebración fue organizada por sus compañeros de trabajo en un restaurante de esta ciudad, donde saborearon ricos platillos y bebidas a la carta, además de disfrutar de un alegre y grato momento.
En su momento, la cumpleañera sopló su velita y disfrutó una rebanada de pastel que el restaurante le obsequió.
Al final, Roselia agradeció a sus amigas por el festejo, los obsequios y las muestras de cariño que le brindaron en todo momento.