Con un acumulado de al menos 26 peatones, ciclistas y motociclistas fallecidos en siniestros viales, la carretera internacional a México (190), de la zona metropolitana de Oaxaca, es una de las 150 vialidades más peligrosas del país, señaló la Coalición Movilidad Segura, que agrupa a decenas de colectivos y activistas.
En su reporte “Ni una muerte vial”, la organización Céntrico, una de las integrantes de la coalición, contempló datos de entre 2019 y 2022 (sobre muertes de peatones y ciclistas) y de 2021 y 2022 (de decesos de motociclistas).
Xavier Treviño, codirector de Céntrico y líder del proyecto Ni una muerte vial, señaló que la velocidad es el principal factor de riesgo que propicia estos atropellamientos hacia peatones y ciclistas o de motociclistas.
Esther Soto, del colectivo Gabi Bici Blanca, señaló que en el estado de Oaxaca es urgente “tomar acciones que garanticen la seguridad de todos los transeúntes y la forma de movilidad que tengan ellos”, pues aunque las muertes viales del reporte se enfocan en el periodo 2019-2022, en lo que va del 2023 han fallecido 3 ciclistas en la zona metropolitana, dos de ellos sobre la carretera federal 175.
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Aunque Jalisco, Ciudad de México, Estado de México y Coahuila se posicionaron en los sitios con el mayor número de vías y muertes a causa de siniestros viales, la coalición remarcó que ninguna entidad quedó exenta de riesgos en sus vialidades. Y por lo cual espera que el reporte (disponible en el sitio web niunamuertevial.mx) sirva para que las autoridades tomen decisiones que ayuden a salvaguardar la integridad de las personas, especialmente porque en mayo de 2022 se aprobó la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial.
Gran parte de estas vías peligrosas corresponden a carreteras y autopistas cuyo entorno fue progresivamente urbanizado en los últimos años y que, a pesar de tener un diseño que prioriza la velocidad, son vías con personas caminando, conviviendo, comprando, sin infraestructura ni equipamiento para su seguridad. En otros casos son vías que se han modificado para ofrecer paso continuo y veloz de los vehículos motorizados dificultando el tránsito cotidiano de las personas”, apuntó Treviño, quien refirió que las “autoridades han ignorado el peligro que esto supone”.