Beneficiarios huautlecos de los programas sociales del gobierno federal pidieron a los funcionarios de alto rango no cambiar continuamente los nombres de los apoyos asistenciales porque confunden a la ciudadanía, tales son los casos de Coplamar, Solidaridad, Próspera y actualmente Bienestar.
Señalaron que eso sucedió primeramente en el gobierno federal de Carlos Salinas de Gortari, lo mismo con Ernesto Zedillo Ponce de León; posteriormente con Vicente Fox, luego con Felipe Calderón, recientemente con Enrique Peña Nieto y esa misma situación se está viviendo con Andrés Manuel López Obrador.
Roberto Enríquez fue uno de los inconformes, argumentando que los programas sociales muchas veces sí llegan a su destino final y otras veces se quedan en manos de los dirigentes políticos, y lo que le viene a dar el tiro de gracia a los beneficiarios, sobre todo a quienes no saben leer ni escribir, es que les pagan con tarjetas electrónicas y a la hora de retirar el efectivo sufren por su ignorancia a los tiempos modernos.