A un mes de que el sismo de magnitud 8.2 causará daños severos en municipios del Istmo de Tehuantepec, en Juchitán la gente sigue viviendo en las calles, toda vez que tiene temor que las casas puedan venirse abajo tanto por las constantes réplicas, como por las intensas lluvias que han caído en la zona.
Hasta el momento no existen cifras exactas, pues las autoridades municipales no cuentan con un censo real de daños y personas damnificadas, lo que genera de alguna manera desconcierto.
Sin embargo, se podría decir que entre un 50 a 60 por ciento de la población juchiteca se encuentra en esta situación, viviendo en las calles, unos bajo alguna lona, otros ni siquiera bajo ese resguardo.
En un principio se manejaba que existía un aproximado de 20 mil personas que debido a que perdieron en la totalidad sus casas y serían demolidas tendrían que acudir a los albergues, sin embargo, estos se encuentran en un 20 por ciento de su capacidad, pues la gente no quiere abandonar sus terrenos y lo poco que pudieron rescatar.
A estos números hay que sumarle los daños que ocasionaron los sismos del 19 y 23 de septiembre de magnitud 7.1 y 6.1 respectivamente, lo que genero nuevas daños y que las casas que se encontraban con daños parciales pasaran a tener datos totales, haciendo que más gente tuviera que salir a las calles ante el temor de las constantes réplicas, las cuales hasta las 9:30 de la mañana de este viernes sumaban ya 6 mil 637.
Juchitán es la tercera concentración poblacional del estado de Oaxaca y según el INEGI en su último censo del 2010, se tienen 74 mil 825 habitantes, aunque en estos últimos 7 años se estaría alcanzando los 100 mil habitantes debido al crecimiento poblacional que se ha tenido.
Por lo que actualmente en las diversas secciones y colonias de Juchitán a un mes del movimiento telúrico muchas familias, comen y duermen en la calle, sin que hasta el momento las autoridades tengan un censo real para su verdadera atención.