La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca pidió frenar la violencia por conflictos agrarios, sobre todo en el recién ocurrido entre las comunidades de Tamazulápam del Espíritu Santo y San Pedro y San Pablo Ayutla.
Ante el riesgo latente de nuevos hechos de violencia en la zona, el organismo emitió una alerta temprana para que el Estado brinde una atención integral que dé solución de manera pacífica e inmediata.
Aunque antes de la violencia del fin de semana mujeres de San Pedro y San Pablo Ayutla ya habían pedido la intervención de las autoridades del Gobierno del Estado, no recibieron la respuesta que impidiera una nueva confrontación.
Además de llamar a las autoridades de los municipios para buscar una solución pacífica a sus litigios, la Defensoría pidió a la Secretaría General de Gobierno (Segego) que implemente y coordine mesas de trabajo resolutivas que atiendan en forma integral el conflicto entre las comunidades mixes.
El mismo exhorto fue para la Fiscalía General y la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO), para que realicen acciones coordinadas que permitan garantizar la seguridad en la zona de conflicto.
Requirió que los involucrados participen en las mesas de diálogo que se convoquen para solucionar el conflicto, además de sensibilizar a sus ciudadanos sobre la necesidad de buscar y colaborar en soluciones pacíficas para este problema.