Pobladores del municipio de San Juan Mixtepec exigen diálogo y seguridad en la comunidad tras el conflicto agrario con Santo Domingo Yosoñama, San Juan Ñumi.
Bernardo Ramírez Bautista, presidente municipal de San Juan Mixtepec, dijo que más que discursos estériles se debe actuar en consecuencia con hechos reales en medio de este conflicto agrario entre estos pueblos de la Mixteca.
Dijo que la comunidad no quitará “el dedo del renglón” para poder sentarse a dialogar con el gobierno federal y del estado para construir los acuerdos necesarios para afrontar este problema que ha provocado el derramamiento de sangre en ambos pueblos.
Destacó la urgencia de tener una base de operaciones mixtas en materia de seguridad para la zona y la suma de voluntades para poder reunir a las partes en disputa y caminar por la paz definitiva entre estas comunidades.
Expresó que en los hombros del estado están las acciones para abonar a la paz y a la reconciliación en Mixtepec, ya que la población en asamblea ha mostrado el interés de construir y dialogar.
Agregó que los trabajos y las demandas sociales están en la mesa del estado, sin embargo, la atención es lenta y esto en cualquier momento se puede desbordar si no se dan más garantías en seguridad.
Señaló que no se puede avanzar bajo la razón de la confrontación y discursos que no abonan en nada, más bien se debe agotar el diálogo y la atención a estos pueblos sumergidos en rezago.
Hay ánimo de la gente en frenar la violencia y prevenirla, sin embargo, los trabajos van lentos y las convocatorias para las mesas de trabajo han sido pocas en vez de bajar a los pueblos y escuchar a la gente, más demandas y más necesidades”, expresó.
La autoridad municipal apuntó que es urgente el tema, ya que la violencia y la inseguridad rondan en ambos pueblos, recargados en grupos antagónicos que buscan desestabilizar y amaga al gobierno con intereses que no aportan nada a la colectividad de ambos pueblos hermanos.
Agregó que como autoridad está interesado en prevenir la violencia y que las instituciones sean más encargadas de resolver el conflicto agrario y social que existe desde hace décadas atrás en esta zona.
Por último, exhortó a la convocatoria de diálogo, sin embargo, se dijo ser respetuoso de los procesos y las formas que puedan poner fin a este conflicto o garantizar la paz y frenar la violencia que tanto duele a las familias de ambos municipios.