A 100 días de gobierno federal que encabeza Andrés Manuel López Obrador, no se ha logrado que el combustible baje de precio como prometió en campaña, todo lo contrario, hoy se encuentra a 20.00 pesos el litro de la gasolina magna, aún más caro que la premium, afectando gravemente el bolsillo de usuarios.
Después de 100 días de gobierno de la cuarta transformación, el precio del combustible ha subido de manera gradual, de 17 pesos a 20 pesos el litro en la zona norte del Istmo, manteniendo un precio inestable, ya que por la mañana las gasolineras ofrecen un precio, por la tarde otro y por la noche otro más, reflejando un incrementando considerable.
Además las gasolineras no despachan litros completos afectando gravemente al presupuesto diario de cada conductor o propietario de vehículo, en común acuerdo con la PROFECO, ya que forman parte de la estructura de la corrupción.
Las gasolineras que actúan a complacencia de la PROFECO solo entregan un boleto para la rifa de algún artículo electrodoméstico y ahora hasta una motocicleta o un automóvil.
En propuesta de campaña se dijo que bajaría el precio del combustible, la luz y el gas doméstico, cosa que no ha sucedido, lo que afecta a la economía y más aún, debido a que los legisladores de la cámara baja no quisieron subir al pleno la propuesta, por lo que se sufre las consecuencias, sobre todo es una burla que la gasolina premium esté costando más barato que la magna, pero la burla es más ruin en la zona norte del Istmo, porque no hay gasolina premium, aunque anuncian que está a 20 centavos más barato.
Por ello los usuarios piden a gritos una política de atención que ayude a bajar el precio de las gasolinas, pues hasta el momento no se ha informado nada al respecto, solo se sabe sobre el combate al huachicoleo, pero no hay una política que esté trabajando en bajar los precios de las gasolinas.