Contrario a lo que sucede la efervescencia electoral y política que se muestra sobre todo con el partido en el poder por la rebatinga con candidaturas, saltos de chapulín para “estar del lado correcto”, para ser visto en las huestes de las campañas o simplemente para salir en la foto con la o el candidato, el proceso electoral de 2024 no ha levantado el ánimo de la ciudadanía.
La madre de todas las batallas es vista con desdén por potenciales integrantes de comités electorales distritales y municipales a grado tal que el árbitro electoral, a cargo de la golpeada consejera presidenta, Elizabeth Sánchez González, se ha visto obligado a ampliar los plazos para integrar esos cuerpos operativos para llevar a buen puerto los comicios del año próximo.
En el caso de integración de los 25 consejos distritales, el plazo inicial estipulado fue del 10 de septiembre al 9 de octubre. Sin embargo, el árbitro electoral, en sesión extraordinaria, amplió la convocatoria hasta el 12 de octubre, apenas dos días antes del examen del 14 de octubre al que se sometieron los aspirantes.
Los consejos distritales serán responsables de la organización de las elecciones de diputaciones locales del 2 de junio del 2024 y para ellos se inscribieron 595 personas de las cuales 493 finalizaron su registro y pasaron al siguiente nivel. De acuerdo a la convocatoria, el 13 de noviembre se presentarán las listas de las personas que cumplieron con los requisitos y entre el 14 y 15 estos deberán ser “palomeados” por representantes de partidos.
O sea, que quienes tendrán a su cargo la organización de elección legislativa deberán pasar el tamiz o la criba de los propios partidos. Extraña democracia.
La designación del embrollo burocrático deberá quedar lista a más tardar el 27 de noviembre y la instalación el día 30, a más tardar. Con la experiencia del ataque frontal del gobierno de Oaxaca al órgano electoral en la persona de la consejera presidenta Sánchez González, no se prevé una elección tersa de dichos consejeros.
Para los consejos distritales es necesaria la selección de 150 personas.
En lo que respecta a los consejos municipales el asunto es aún menos propicio sobre todo por lo disputado de los 153 ayuntamientos con una característica particular en esta ocasión: la disputa es al interior de Morena, en una guerra fratricida nutrida por el incesante chapulineo del PRI, PAN, y verde hacia las filas del partido morado.
También aquí el árbitro electoral debió ampliar el plazo de la integración que se cerraba el 21 de octubre, sin embargo, el domingo el IEEPCO determinó extender el plazo hasta el jueves 26 de octubre a las 23:59 hrs.
Los consejos municipales están integrados al menos por 12 personas, 6 propietarias de puestos como el de consejero presidente, una secretaria y 4 consejerías con sus suplentes. Esto implica comprometer a 918 ciudadanos propietario o más de mil 800 personas si se consideran a los suplentes para los próximos 6 a 8 meses, hasta fines de junio de 2024, en que concluirían sus funciones electorales para que la elección pase a la siguiente fase.
La cifra de ciudadanos con mediana preparación político-electoral, el conocimiento que de ellos tendrían los actores y quienes disputen un puesto de elección popular así como el clima de inseguridad política y social y crispación intercomunitaria sin duda desalientan a los posibles aspirantes a un puesto de este tipo. Pero vamos más lejos, la convocatoria indica que estos consejos se integrarán de manera paritaria e inclusiva, atendiendo al principio de paridad de género, también por personas indígenas, afromexicanas, adultas mayores, jóvenes, de la diversidad sexo genérica, así como personas con alguna discapacidad.
Las “dietas” en los poco más de seis meses fluctuarán entre los 8 y los 12 mil pesos mensuales, acorde a la posición a desempeñar.
Todo un reto y carrera contra el tiempo para quien organizará las elecciones y, por lo que se ve, hay desinterés ciudadano y no mucha tela de dónde cortar.
ELECCIONES COMO DISTRACTOR
Sin duda Oaxaca se ha mimetizado y reedita sin tapujos el “ejercicio del poder” y la moda impuesta desde Palacio Nacional para tener a la ciudadanía y al electorado permanentemente distraída, embobada.
Faltan ¡8 meses! para las elecciones de junio de 2024 y, en el caso de la conformación de las cámaras de 10 a 11 meses para renovar las legislaturas locales, federales y el Senado y ¡15 meses! para el cambio de presidencias municipales; falta más de un tercio del actual ejercicio en cabildos y ya hay candidaturas virtuales para casi todas las posiciones importantes.
Ya tenemos a los dos gallos, con muy discretos espolones, para el Senado. Muchos han levantado la mano en sus distritos y regiones para las legislaturas y otros más ya dieron el Sí en busca de la reelección en sus ayuntamientos a cambio de fidelidad al esquema del actual gobierno, el brinco o chapulineo a Morena, lealtad de por medio y en busca de inmunidad respecto a la transparencia o cuentas por rendir.
El acarreo para el acto multitudinario del domingo de Luis Alfonso Silva Romo fue el banderazo a la lucha por la presidencia municipal de Oaxaca de Juárez, la cual se ha convertido en tumba política para quienes la han desempeñado.
Con la bendición de Palacio de Gobierno, Silva Romo ya se placea como virtual aspirante y para ello ejerce el músculo político y se apoya en la verborrea de que ya es suficiente culpar de todo a la falta de presupuesto o al pasado. Lo mismo lo oímos hace seis y tres años y se han agravado los males que aquejan a los municipios de la zona metropolitana.
Por cierto ¿es tan necesario mostrar a los traidores priistas? ¿De verdad tienen tal peso como para subirlos a la plataforma con “los candidatos” desatando la ira y los cuestionamientos de la gradería morenista? ¿Son tan buenos mapaches como para placearlos?
Gabriela Pérez, la diputada que traicionó al PRI, se ha convertido en “dama de compañía” de diversos actores políticos morenistas. Estuvo en el Fortín, en una gala de música y más junta con los liderazgos morenitas que muchos personajes de Morena en Oaxaca
Por cierto, ¿alguien sabe dónde está la oposición panista, priistas, perredista?
¿Ya le avisaron al PRI que Morena prácticamente tiene amarrado el candidato citadino y ellos siguen durmiendo el sueño de los justos?
“¿Primer lugar para aplaudir?”
La forma en que la prensa presenta muchas notas sin duda nos mueve a la reflexión. ¿Es para vanagloriarse que Oaxaca sea el “primer lugar” en violencia de género? ¿Se debe aplaudir? La nota es más que lamentable, nuestro estado es el lugar más violento para que una mujer intente ocupar un puesto de elección popular, desempeñar alguna posición política, participar en decisiones o ejercer el poder. Entonces NO es “primer lugar” sino el lugar más peligroso para una mujer política. Visto de esta manera, la situación “cambea”.